Toma las riendas de tu negocio con la guía de gestión empresarial 

Llega el momento en el que toda empresa debe crecer, expandirse, generar más ingresos…  Y para que ese proceso sea todo un éxito, necesita tener una guía de gestión empresarial a mano que le guíe en el camino, como una hoja de ruta. 

Y es que tener un manual how to llevar una empresa y no morir en el intento, es una de las claves para la evolución de cualquier empresa. 

Es por eso que hoy te contamos qué debe incluir ese manual de gestión empresarial que querrás llevar siempre contigo. 

¿Mueres por saber más? Veamos qué recomendaciones te podemos dar:

Consejos para crear una buena guía de gestión empresarial

Cuando se habla de gestión empresarial, el mensaje se centra en entender cómo guiar, administrar y organizar los diversos recursos empresariales con los que cuentas para lograr tus objetivos productivos.

Por supuesto, en la teoría parece bastante fácil, pero cuando pasas a la práctica te das cuenta de que no es tan sencillo estar al frente de una compañía y verificar de forma constante que todo vaya viento en popa.

Sabemos lo estresante que puede resultar estar al mando y es por ello que lo mejor que puedes hacer es crear tu propia guía de gestión empresarial en la que puedas definir todo lo que se necesita cumplir y todo de los que tienes que estar al pendiente. 

Así que, si estás iniciando, y tienes dudas al respecto, nosotros te ayudaremos a conocer algunos consejos que te serán de ayuda para sobrellevar la gestión de tu empresa: 

1. Define los objetivos a alcanzar en orden

Sin duda, lo primero que tienes que hacer es plantear los objetivos que deseas alcanzar a nivel empresarial y hacerlo en orden.

tienes que tener en cuenta que, si bien en el momento en el que creas tu plan te querrás centrar en objetivos para el corto plazo, también tendrás que pensar en el futuro de tu empresa. Por lo tanto, lo mejor que puedes hacer es crear desde el inicio una lista de planes en orden.

Es aquí cuando te podría ser de ayuda trabajar con la metodología SMART, que te invita a crear objetivos de la siguiente manera:

• Specific (específicos): las metas específicas son las más básicas de todas y deben corresponder a lo que deseas que tu compañía alcance de forma general. 
• Measurable (medibles): se trata de objetivos que podrás medir con un plazo de tiempo determinado, como por ejemplo, la cantidad de ventas que logras concretar antes de un mes.
• Attainable (alcanzables): sé realista con los objetivos que estás trazando y asegurate que de verdad sean alcanzables, pues de otro modo no estarás siendo realista con lo que deseas lograr. 
• Relevant (relevantes): de igual forma, necesitas trabajar con fines relevantes que de verdad puedan servir para algo útil en lo que buscas lograr con tu empresa. 
• Timely (realizables en un plazo de tiempo específico): en caso de que haya cosas que necesites hacer con el tiempo medido, tienes que utilizar este tipo de objetivo, puedes usarlo para trazar aquellas metas que tienes que cumplir antes de una fecha en específico. 

2. Establece presupuestos realistas y sigue de cerca la contabilidad de la empresa

Otro aspecto que debe entrar sí o sí en tu planificación de gestión de empresa es el presupuesto, pues al final del día contar con el dinero para desarrollar todas las tareas necesarias es algo fundamental.

Es por ello que necesitas crear un presupuesto bien organizado y, conforme pase el tiempo, analizar cómo avanza la contabilidad del negocio para determinar si todo está yendo acorde a lo planeado. 

3. Crea una buena relación con todos tus empleados e invierte en su capacitación

Al final del día, quienes en realidad sacarán adelante tu negocio, no serás solamente tú, sino todos los empleados de la compañía. 

Puesto que, de no contar con cada uno de ellos en los departamentos que conforman a la empresa, no alcanzarías de forma eficaz los objetivos que te has planteado en un primer momento. 

Por lo tanto, es fundamental que crees una buena relación con tus empleados de modo que ellos estén dispuestos a seguir tus indicaciones y hablar contigo siempre que tengan dudas. 

En el mismo orden de ideas, es igual o hasta más importante que inviertas tiempo en capacitarlos para las labores que cada uno de ellos desarrollará dentro de la empresa. De esa manera, podrás estar seguro de haber creado un equipo de trabajo que sabe muy bien lo que hace. 

4. Organiza bien los procesos empresariales

Dentro de tu plan de gestión, no puedes olvidarte de incluir los procesos empresariales a cumplir de forma organizada.

Es en este punto en el que deberás crear distintos departamentos en la compañía para que, quienes trabajen en cada uno de ellos, se encarguen de labores específicas a cumplir.

Además, en cada departamento, debe haber un gerente que se encargue de comunicarles a los trabajadores lo que deben hacer y de informarte a ti cómo avanzan los trabajos pendientes. 

5. Invierte en herramientas de innovación digital

Puede que en un primer momento consideres que esto no te resulta importante, pero conforme tu empresa vaya creciendo y expandiéndose te darás cuenta de lo fundamental que resulta invertir en herramientas digitales que automaticen procesos y mejoren el análisis de datos.

Existen programas que te permitirán crear una organización digital a la que cada departamento puede acceder y así todos se mantendrán al tanto de todo, lo cual resultará aún más importante cuando tu empresa tenga más de una sucursal. 

Además, contar con un respaldo digital de todo te permitirá recurrir a herramientas digitales mediante las cuales podrás realizar análisis de datos para verificar que todo va bien, revisar la experiencia de los clientes y mucho más. 

Por supuesto, si quieres trabajar con opciones de venta digitales, entonces en ese momento más que nunca tienes que empaparte de todo lo que te puede ofrecer la tecnología. 

6. Realiza análisis empresariales de forma constante

Un típico error que se suele cometer es que muchos crean un plan firme de gestión empresarial, pero luego no se preocupan por analizar los procesos cada cierto tiempo.

Esto es algo de lo que tienes que estar pendiente, pues entonces no tendrías manera de confirmar si se están cumpliendo los objetivos planteados, si tus trabajadores están realizando las tareas que les corresponden, si los clientes están felices con el trato, etc etc etc. 

Además, los objetivos empresariales no son estáticos, cambian con el paso del tiempo, pues si ya has cumplido uno, tienes que pensar en qué otros objetivos necesita la empresa según su actualidad.

De allí que sea fundamental que dentro de tu guía de gestión empresarial establezcas cada cuánto tiempo se deben hacer los análisis y cumplirlos a tiempo. 

7. Sé el líder que tus empleados necesitan

Por último, pero no menos importante, tienes que esforzarte en ser un buen líder si deseas crear una buena relación con todos a la vez. 

Ya ha quedado muy atrás esa idea antigua de los jefes amargados que solo dan órdenes y esperan que se cumplan a rajatabla. 

Hoy en día, si de verdad quieres que todo marche bien dentro de la compañía, lo mejor que puedes hacer es tomar la postura de un líder que se encarga de guiar a todos hacia las metas que la empresa necesita cumplir. 

Para lograrlo de forma eficaz, puedes procurar leer o formarte al respecto del liderazgo empresarial. 

Características sobre las que se basa la gestión empresarial

Ahora que ya tienes una idea más completa de cómo tienes que elaborar tu guía para que sea eficiente, tienes que tener en consideración también cuáles son las que características sobre las que este tipo de planificación se basa.

Se podría decir que las mismas son los ejes principales sobre los cuales se debe erigir cualquier tipo de guía de gestión empresarial que se busque que genere buenos resultados para la compañía.

Es por ello que no podemos finalizar el artículo de hoy sin antes darte a conocer cuáles son estas bases fundamentales de toda buena gestión empresarial. Así que, a continuación, te dejamos una lista completa que reúne todas las características que tienes que conocer para trabajar con ellas: 

• Verificable.
• Estratégica.
• Organizada.
• Eficaz.
• Controlada.
• Eficiente.
• Comunicativa.
• Proactiva.
• Colaborativa.
• Impulsora.
• Bien liderada. 
• Bien dirigida.

Modelos eficaces para aplicar una buena gestión empresarial

Al momento de crear tu guía para la gestión empresarial, puedes seguir una serie de modelos que te permitirán organizar todos los datos según la manera en la que desees trabajar el proceso de gestión.

Hoy en día, dentro del mundo empresarial, se trabajan con diversos modelos de gestión empresarial que han resultado eficaces para grandes marcas.

Así que, a continuación, te los presentamos a modo de lista para que determines cuál consideras que te sería de más ayuda: 

• Modelo jerárquico: posee un orden vertical según las prioridades a cumplir de arriba hacia abajo y que luego se desglosa para los demás puestos. 
• Modelo de eliminación de intermediarios: esta es una guía para los que buscan tomar la gestión por sus propias manos y eliminar la intermediación de cualquier otra persona. 
• Modelo de franquicias: es un modelo creado con la intención de que también otras empresas puedan usarlo, siempre y cuando se cedan los derechos. 
• Modelo de cooperativas: este es una opción a emplear cuando se desea formar grupos de miembros de manera que sean ellos quienes realicen las labores de la gestión empresarial. 
• Modelo de Zeitgeist: si trabajas de modo más humanista, puedes utilizar este modelo que se estructura de manera circular para vincular la importancia de todas las labores y departamentos y plasmar la importancia de que todos trabajen a la par. 
• Modelo de Mitzberg: este es un diseño que procura separar la guía en un núcleo central de operaciones, un grupo que dirija las tareas, una línea que ejecute las labores, una tecnoestructura y por último el personal de apoyo. 
• Modelo Lean: se trata de un diseño de guía con el que se procura eliminar cualquier fricción que pueda existir en los procesos empresariales.

¿Por qué es tan importante contar con una guía de gestión para tu empresa?

Ahora bien, si incluso luego de leer todos los consejos que te hemos dado tienes dudas al respecto de la importancia de una buena gestión empresarial, es momento de aclarar un poco más el tema.

Por muy básico que suene todo lo que hemos venido explicándote, lo cierto es que a la hora de implementarlo solemos olvidarnos de darle la importancia debida a esto y es entonces cuando las cosas se comienzan a salir de control.

Si no tienes objetivos marcados, no vas a llevar a la empresa a nada; si no creas una buena comunicación entre tus empleados; podrías crear un ambiente laboral tenso; si no buscas herramientas tecnológicas que faciliten el trabajo; le podrías terminar delegando más responsabilidades de la cuenta a los trabajadores y la lista sigue y sigue.

Es por ello que, luego de establecer una buena guía de gestión empresarial que se adapte bien a tu compañía en específico, podrás crear una competitividad laboral que impulsará a tu negocio hacia mejores oportunidades de ventas o de captación de clientes.

Además, gracias a trabajar de forma bien gestionada, podrás optimizar todas las labores y contarás con equipos de trabajo que no chocarán entre sí.

De forma general, tener una guía de gestión empresarial adecuada a tu compañía como tal te permitirá gozar de una gran variedad de beneficios. 

Tenemos la esperanza de haberte podido ayudar hasta este momento, y si tienes ganas de compartir con nosotros tu opinión, déjanos saber en comentarios qué te ha parecido esta guía (comentar es gratis).